Hoy es una fecha
marcada en rojo en el calendario de los cehegineros. Hoy Cehegín se
viste de fiesta en honor a la virgen de las maravillas. Es por ello que el
apartado que hoy lanzo no podía faltar en este blog.
En estos
días se construye rápido. Se trata de elementos arquitectónicos, con fecha de
caducidad, utilizados para el disfrute de la fiesta y los usuarios. Como decía
el maestro Fran Lloyd Wright “la Arquitectura debe pertenecer al entorno donde
va a situarse y adornar el paisaje”, y eso es lo que se pretende, aquí en
Cehegín, durante estos 8 días a los que todos estáis invitados.
Parece cuestión de los últimos años, una moda como
tantas, eso de ver pequeñas construcciones a modo de instalaciones
temporales, incluso artísticas, en sitios perfectamente elegidos de la
ciudad que permiten (y pretenden) la interacción de los transeúntes.
Nada más lejos de la realidad. Los orígenes de la arquitectura efímera bajo la
que se engloba este tipo de elementos urbanos viene de lejos: hay quien sitúa
su nacimiento en la Edad Media y, su desarrollo, en el Barroco.
En aquellos tiempos la madera y las telas se
convirtieron en los elementos imprescindibles para elaborar espacios que
sirvieran de plataformas propagandísticas del poder religioso o político.
El paso del tiempo y la evolución de los materiales
fueron perfeccionando las técnicas e implicando el uso de más creatividad.
De esa manera se llegó al siglo XIX, cuando el hierro y el cristal
se convirtieron en protagonistas de construcciones efímeras que hacían las
delicias de todos los que visitaban las Exposiciones Internacionales.
Sí, la Torre Eiffel no estaba pensada para
quedarse allí eternamente.
En la actualidad, concebir espacios con objetivos
precisos en tiempo y localización es un reto. La investigación en nuevos
materiales no cesa y la creatividad no tiene límites. Desde lo último en
tecnología hasta materiales más preocupados por la sostenibilidad y el
medioambiente, todo a nuestra disposición para construir lugares perfectos para
el diálogo y la interacción con quienes tienen la suerte de acercarse a
ellos en el momento y lugar adecuado.
Esto es lo que estamos viviendo y vivimos desde hace
ya unos años en nuestra localidad, Cehegín,
durante la semana del 8 al 14 de Septiembre. El “Parque Nuevo” se llena de esta
Arquitectura efímera, construcciones temporales con las que la gente mantiene
ese dialogo e interactuación constante, usándolas durante toda una semana.